Un triunfo justo y merecido ya que el Diter Zafra fue el que mas lo busco , mas posesión de balón tuvo y mas opciones claras creo sobre la portería rival. Así puede resumirse un choque que tuvo también como noticia una nueva modificación táctica por parte zafrense ante las bajas de Ruby y Piru. Y a la vez un encuentro en el que los hombres de Ito regalaron un excelente fútbol y ratificaron su buen momento de forma no en balde, de los últimos 8 partidos han ganado 4 y empatado dos. Dicho lo cuál reflejamos la crónica publicada por el DIARIO HOY ( 13- 4- 2014 ) y firmada por este redactor.
El Díter Zafra, con los deberes hechos, regaló a sus
aficionados un excelente fútbol y despertó de su sueño de fase de ascenso a un
Moralo que, a pesar de caer derrotado y quedarse casi sin opciones (está a 13
puntos y quedan 15), ratificó las razones de su buena clasificación.
El partido se preveía que podría estar lleno de
acercamientos a ambas áreas. Y así fue, dado que, en el primer cuarto de hora,
los locales monopolizaron las acciones de ataque. Con ocasiones por parte de Javi Martín , Uva , Ruano y Teo. La respuesta del Moralo tenía
que llegar de las botas de uno de sus dos mejores hombres: Rulo.
La segunda parte arrancó de manera brillante con el mejor
gol del partido en el 49. En una internada de
Ruano por el costado izquierdo
cuyo pase atrás es rematado por
Javi Martín enviando el balón al
palo largo de la portería de Luis.
En el 59, una espectacular volea de Rulo dio en el poste
derecho de la meta de Peláez. Apenas dos minutos más tarde, el palo se alió con
el portero visitante a remate de Ruano. Parecía que el Moralo llegaba menos
pero, en el 67, Johnny, de falta directa escorada a la izquierda, sorprendió a
Peláez, adelantado, para poner la igualada. Ito metió más artillería con
Alberto Pla, que vio como se le anulaba de manera injusta un gol absolutamente legal por un fuera de juego inexistente del jugador zafrense ala hora d e controlar el esférico y ejecutar el disparo en le interior del área morala.
El premio llegaría en una internada de Ángel Serván, hasta la
cocina, donde fue objeto de penalti por parte de Asiel. Pena máxima que Uva
transformaba con un disparo raso y al palo derecho de Luis que pesea su buena estirada no pudo llegar, para cerrar así el partido.
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