Tengo unas enormes ganas de escribir lo que realmente siento para desahogar la inmensa decepción y cabero que poseo , porque me duele este club aunque no sea natural de Zafra , pero lo dejare para el final de la temporada. Lo que es incomprensible es que el Diter Zafra alla pasado de ser uno de los grandes favoritos al cuarteto de cabeza a convertirse en el medico cuya consulta ( el Nuevo Estadio) le permite dar vida o al menos ofrecer una bombona de oxigeno ( en forma de victoria ) a sus rivales en feudo zafrense. Solo reflejaré la crónica publicada por el DIARIO HOY ( 11-4-2016 ) , y firmada por este redactor.
En muchas ocasiones el fútbol tiene mucha cercanía con circunstancias que marca la vida real y en el caso del Díter Zafra, en esta segunda vuelta, su estadio es como el médico que cura al enfermo, una vez que pasa por su consulta. Y es que el Amanecer y anteriormente San José, San Vicenteño o Coria demostraron que el feudo de Zafra ha dejado de ser inexplugnable y sirve para dar vida a sus rivales.
La victoria seguedana ante el Valdivia le dio la tranquilidad al Díter Zafra que si no estaría metiéndose en problemas. El Amanecer salió con el acelerador apretado desde el minuto 1 sabiendo lo que se jugaba. Así Rai, el mejor jugador de su equipo, ratificó aquello de los viejos rockeros nunca mueren.
En el 5 fallaría su primera opción en el mano a mano ante Ímola. Pero en el 14 llegó la jugada que sería definitiva. Un balón al área local en el que Rai se fabricó el penalti con el que fue castigado el Díter y que él mismo ejecutó engañando a Ímola. Ese tanto potenció el estado anímico del Amanecer encerrando al Díter en su campo.
Rubén Fuentes pudo meter de falta en el 35 pero el meta Nacho sacó una gran parada. Y en el 39, la más clara, media volea de Ruby dentro del área con Nacho batido que salió lamiendo el palo derecho.
En la segunda mitad, el Díter soñó con la remontada a través de una mayor posesión y la presión del Amanecer se redujo, mella del paso de los minutos y el desgaste. Hubo fases en las que los segedanos acorralaron al Amanecer pero no llegaron a cristalizar este dominio, con la ocasión más clara un balón que sacó bajo palos un defensor visitante con Nacho ya batido.
El Amanecer pudo matar a la contra, primero por medio de Rai y el segundo casi acabando el partido por medio de Iván, que perdió el duelo con Ímola. Al final, victoria para un Amanecer que supo aprovechar mejor sus momentos.
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