Todo en la vida tiene un principio y un final. Y este hermoso , mágico y apasionante mundo del fútbol, no podía ser menos ya que inevitablemente esta unido a la amplia cadena social. Por ello, aprovecho estas lineas para poner aquí y ahora el punto y final ( se que me va ha costar ) pero la promesa dada por segunda vez a un amigo , ya no pudo y debo romperla en ese pacto entre caballeros, que puede sonar a épocas de capa y espada pero que todavía si miramos con detenimiento esta presente en pleno siglo XXI, en esas comparativas entre lo realizado por el Diter Zafra y lo hecho por Bermejo en el desarrollo de estas cuatro últimas temporadas, que a lo largo de estos días,hemos ido publicando en esta ventana informativa. Rompí (por mi parte ) la primera promesa . Además pensándolo muy bien, por desgracia quizás no sirva para abrir los ojos. Y al fin y al cabo, los números siempre estarán ahí.
Insisto, pongo aquí el punto y final a ese apartado que humildemente solo tenia dos objetivos. Hacer ver a los aficionados zafrenses lo que hemos perdido y lo que hubiéramos podido disfrutar. Y en segundo lugar, poner en valor ( como se merece ) el impresionante trabajo en la siempre complicado mundo de los entrenadores de un amigo y un brillante entrenador.
Si he molestado ha alguien con ello pido disculpas. Pero no pudo dejar de cerrar estas lineas con la sensación ( desde mi punto de vista personal ) de rabia, de haber perdido una gran oportunidad.
Lo dicho, mil disculpas.
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